La religión de Mesopotamia se originó en Sumeria, expandiéndose por todo el territorio entre los ríos Éufrates y Tigris.
Religión de Mesopotamia y su influencia en el mundo Mediterráneo
Abarcó los reinos conformados por Asiria, Babilonia y Acadia, que adoptaron los mismos dioses con nombres diferentes.
Las ideas religiosas de esta región se diferenciaron notablemente de otras aparecidas en el continente asiático durante la misma época.
Características de la religión de Mesopotamia.
El principal rasgo de la religión de Mesopotamia fue su carácter politeísta y la adoración de dioses castigadores y tiránicos.
Los dioses eran considerados los amos de los humanos, que habían sido creados para ser sus sirvientes.
Algunas deidades estaban relacionadas con la astrología y los fenómenos naturales, cada uno representaba un elemento de la naturaleza.
El dios supremo era una copia del rey mortal, poseía una corte que estaba a su servicio y decidía sobre el destino del pueblo.
Los templos de religión de Mesopotamia o zigurat se ubicaban en la cúspide de una alta construcción a la que se accedía por escaleras, ello le permitía al pueblo comunicarse con sus dioses.
Los mesopotámicos tenían la visión de que la muerte representaba algo negativo
Los dioses de la religión de Mesopotamia.
Por su parte los sumerios poseían una triada de dioses:
- Anu era considerado el dios de cielo, siendo la deidad suprema, con el tiempo fue reemplazado por Marduk.
- Enki representó al dios de la tierra y el agua que reinaba en las profundidades del planeta.
- Enlil personificaba al dios del viento.
Los asirios adoraban la siguiente trilogía:
- Ishtar se asociaba con la sexualidad, era la diosa del amor y la guerra.
- Shamash se le atribuía los valores de la equidad y justicia y como dios del sol.
- Sin constituía la sabiduría y dios de la luna.