Religión de los Mayas: tradiciones y creencias de esta compleja doctrina

La religión de los Mayas fue el eje central que influyó en todos los aspectos de la vida cotidiana de esta civilización, desde lo más simple a lo más complejo.

Así nos encontramos que la religión dominaba las decisiones en relación a la agricultura, ceremonias, política, desarrollo científico y cultura.

Características de la religión Maya.

Religión Maya.
Religión Maya. Photo by Jimmy Salazar. Unsplash.

 Los principales rasgos que definieron a la religión de los Mayas fueron:

  • Politeísta: porque adoraban a varios dioses a la vez, y cada actividad era regida por una deidad específica.
  • Basada en la naturaleza: debido a la inspiración en elementos y fenómenos naturales.
  • Dualista: partían del principio que tanto el bien como el mal son igual de sagrados.

Otra característica era que el pasar de la vida se efectuaba alrededor de ciclos infinitos del universo que estaban divididos por un sistema de calendarios creados por los dioses.

También los templos de la religión de los Mayas, fueron monumentos notables que se construyeron con bases piramidales, desde donde los sacerdotes daban sus ceremonias y ritos.

Las ceremonias se realizaban para dar ofrendas a los dioses

que necesitaban alimentarse para poder obrar a favor del pueblo.

Siendo las ofrendas más preciadas: el sacrificio humano, los bailes, cantos, ayunos, abstinencia sexual, hongos alucinógenos, animales y bebidas fermentadas.

Dioses de la religión Maya.

Religión Maya.
Religión Maya. Photo by Robbie Herrera. unsplash.

Por poseer un dogma politeísta la religión de los Mayas adoraba a los dioses de acuerdo a su significado con la vida, entre los más importantes se encuentran:

  • Hunahpú: dios gemelo de Xbalanqué, con quien creó el universo.
  • Itzamná: hijo del dios creador Hunahpú, representa al señor de los cielos, el día y la noche, creador del hombre.
  • Yum Kax: controla el alimento sagrado de los mayas, por ello es el dios del maíz y la agricultura.
  • Kinich Ahaú: dios del sol e hijo de Itzamná.